Aprende para qué sirve el agua que hay en tu cuerpo, así como la utilidad de la sal de mesa (NaCl), el calcio, el magnesio, el potasio, el bicarbonato y los protones que están en los alimentos que ingieres.
El agua que ingerimos todos los días es indispensable para nuestras vidas. Constituye el diluyente universal que empleamos para que puedan funcionar otras moléculas vitales.
La sal de mesa, por su parte, ayuda a controlar la cantidad de agua que hay en nuestra sangre y por tanto puede definir cómo se encuentra nuestra presión arterial.
El potasio de las frutas y las carnes ingresa al interior de nuestras células y junto con el sodio y el calcio establecen la actividad eléctrica de nuestro corazón, neuronas, músculos, entre otros órganos.
El calcio, el fósforo y el magnesio que adquirimos de lácteos o pescados nos ayudan a fortalecer los huesos y favorecer la producción de nuestro material genético.
Todos estos elementos, en un adecuado balance, contribuyen a que llevemos una vida saludable, pero ¿cómo lo hacen? En este curso, daremos una mirada al recorrido que hacen el agua, la sal de mesa, los ácidos y las bases en nuestro cuerpo, para conocer su funcionamiento e importancia. Asimismo, conocerás las implicaciones que conlleva el desequilibrio de estos elementos en tu cuerpo, a partir de casos clínicos cotidianos que se irán resolviendo paulatinamente a lo largo de cada semana. Todo lo anterior, irá acompañado de ejemplos cotidianos que buscan favorecer la comprensión de los conceptos y se realizarán recomendaciones para que el agua y las sales te ayuden a llevar una vida saludable.