Descripción del curso
A medida que crece la responsabilidad de un directivo empresarial, la necesidad de conocer la finanza empresarial se hace más acuciante. A la vista del balance mensual (monthly balance sheet) de la empresa, ese directivo no-financiero sospecha que le fallan los conocimientos de Contabilidad.
¿Es preciso saber Contabilidad para entender las finanzas empresariales? Algo sí, pero no tanto como bastante gente presupone. De hecho, le bastará con entender el sentido y enfoque del balance de una forma lógica y práctica para ir comprendiendo los conceptos que rigen las finanzas de cualquier empresa.
El balance es un apretado texto expresado en dos porciones laterales, lado derecho y lado izquierdo, bastante más precisos que lo que se entiende en política por izquierda y derecha. ¿Qué rol cumple el lado izquierdo del Balance? Algo tan sencillo como constituirse en un listado o inventario de las propiedades que la empresa maneja para dar servicio o producto a sus clientes. Su lectura, por tanto, no ha de revestir ninguna dificultad; por extraño que pueda parecer, cualquier término, tal como lo exprese el contable de la empresa, ha de traducirse en términos de un bien en propiedad.
A medida que crece la responsabilidad de un directivo empresarial, la necesidad de conocer la finanza empresarial se hace más acuciante. A la vista del balance mensual (monthly balance sheet) de la empresa, ese directivo no-financiero sospecha que le fallan los conocimientos de Contabilidad.
¿Es preciso saber Contabilidad para entender las finanzas empresariales? Algo sí, pero no tanto como bastante gente presupone. De hecho, le bastará con entender el sentido y enfoque del balance de una forma lógica y práctica para ir comprendiendo los conceptos que rigen las finanzas de cualquier empresa.
El balance es un apretado texto expresado en dos porciones laterales, lado derecho y lado izquierdo, bastante más precisos que lo que se entiende en política por izquierda y derecha. ¿Qué rol cumple el lado izquierdo del Balance? Algo tan sencillo como constituirse en un listado o inventario de las propiedades que la empresa maneja para dar servicio o producto a sus clientes. Su lectura, por tanto, no ha de revestir ninguna dificultad; por extraño que pueda parecer, cualquier término, tal como lo exprese el contable de la empresa, ha de traducirse en términos de un bien en propiedad.